RECONSTRUYENDO
Cuando pasamos por emociones que nos llevan hasta el límite, donde nos sentimos perdidos o carentes de algo es porque realmente estamos teniendo una verdadera oportunidad con nosotros mismos.
Todos los seres humanos en muchas ocasiones empezamos a encargarnos de las carencias de los demás, nos convertimos en el bastón de sus existencias y tratamos de llenarles esos vacíos que tienen y representan un desequilibrio en la relación que llevamos con ellos.
Así continuamos llenando vacíos no nuestros sino ajenos, pero realmente a nosotros también nos llega el tiempo de asumir los propios y estos ya están más grandes porque solamente nos hicimos visibles para los demás pero no para nosotros mismos.
Tocamos la puerta a ese ser al que tratamos con amor y acompañamiento y probablemente esa ayuda no llegara. Te preguntaras por qué?
El por qué es muy doloroso, y a veces no nos gusta admitir que nosotros nos encargamos de recoger justamente eso.
Y cuando sucedió?, cuando tu no le permitiste a ese ser crecer, a que afrontara sus propios temores, cuando tu constantemente quisiste evitarle una carencia, lo que hiciste fue alimentarlo y olvidaste que tú también necesitabas que tomaran tu mano cuando te sentías caer.
Ahora solo debes recoger lo tuyo, tu esencia y de nuevo encaminarte y transformar tus propias falencias, es muy importante que el primer lugar en todo siempre seas tú, es importante que primero te reconstruyas para tener cimientos suficientemente fuertes que te ayuden a convivir con las carencias de los demás sin que estos te aparten de tu propio bienestar.